lunes, 9 de septiembre de 2013

67. Cuaderno para dibujar y todo lo demás

Balieiros. Combinando lápiz grafito con lápiz de color.

El cuaderno de campo es una herramienta útil y básica. Siempre procuro llevar uno encima con algún lápiz. Hacía tiempo que no me lo tomaba en serio pero decidí hace unos meses dibujar en cualquier momento y ocasión que tuviese porque nunca sabes lo que vas a tener delante. Y, sobre todo, es el entrenamiento ideal para coger soltura con las manos o no perderla. No importa que el motivo se mueva si eliges un modelo vivo, o que cambie la luz si es un paisaje, lo importante es mover el lápiz, entrenar la vista, reducir las formas complejas a líneas básicas. Tampoco se pretende hacer obras definitivas y "perfectas", se trata de tomar apuntes más o menos rápidos y trabajar de forma libre. Poco a poco cada uno encuentra su propio estilo.
Los dibujos que veis aquí son una pequeña selección de los que hice en mis vacaciones en Corrubedo. Allí tuve la oportunidad (de nuevo) de coger bastante el cuaderno en los ratos de playa sobre todo. Tenía modelos por todas partes. Nada mejor para entrenarse un poco que intentar "pillar" a la gente que charla, pasea...Y después un poco de paisaje.
Al principio empecé con lápiz de grafito de distintas durezas y al final elegí unos cuantos lápices de color (los básicos: azul, rojo, amarillo y azul) combinados con el lápiz para conseguir otros efectos.
Por último decir que en la lista de blogs que sigo está "Dibujos y pegoletes" de Inma Serrano, que ha hecho del cuaderno de campo un arte.